La tarde había quedado pintada en dos colores encontrados: al oeste cielo azul con sol intenso, al este negras nubes que amenazaban tormenta .Dos colores para dos estados de ánimo sobre un mar de olivos alineados casi de forma natural. Desde el aire parecían surcos hechos por un gigante en un mar de olas verdes.
José no tenía un día muy bueno. Por la mañana nadie le había contratado al jornal y de tarde iba a jalear olivos para un viejo conocido por cuatro perras. No había comido y su esposa llevaba fuera de Baeza todo el día.
Y por si fuera poco al llegar a la finca olivarera, se dio cuenta de que entre los componentes del grupo estaba Paco su peor enemigo :llevaban años sin hablarse después de una pelea con destellos de navaja.
Todo parecía conjurarse para un mal día que esperaba que acabara pronto . La tarde de aquel verano del 1983 era plomiza como pocas había conocido José y los vareos de la aceituna costaban el doble de esfuerzo. Para rematarla ,el cielo se tiñó de negro y bajó Thor para darles unos cuantos latigazos de luz, decorados con grandes estruendos y agua abundante..
El capataz del grupo ,tras calderos de agua bajando de los cielos, ordenó cobijarse en una caseta de viejas tejas ladeada por el paso del tiempo. Allí esperaron a que escampara pero el cielo no tenía la más mínima intención de dejarse amedrentar . Así que decidieron merendar con jamón, queso, pan ,vino y otras viandas que trajo la abuela Azucena
La abuela los conocía a los dos desde pequeños y en cuanto terminaron, le indicó a Paco que cortara el bizcocho de aceite que había hecho unas horas antes. Para José el ambiente parecía helarse a cada minuto: ¡aquel individuo ducho en navajas con un cuchillo de dimensiones en las manos….!
Casi sin mirarlo Paco se le acercó y le ofreció un trozo de dulce…
-¡Vamos…joé.!.¡Coje el “bizcosho” y dame un “abraso“…! ¡Todo orlvidao !-
Risas y palmas ambientaron de forma festiva aquella reconciliación que había organizado la vieja Azucena.
BIZCOCHO DE ACEITE DE OLIVA VIRGEN.
Ingredientes :
4 huevos tipo L a temperatura ambiente.
150 gr. de azúcar.
75 gr. de harina de trigo.
75 gr. de harina de maíz fina. (tipo Maizena ).
100 gr. de aceite de Oliva virgen extra.
La ralladura de un limón mediano.
(No lleva levadura en polvo. La esponjosidad de la masa hará que suba sola en el horno)
Cómo hacerlo.
Precalentar el horno a 180º.
Separar las yemas de las claras. Batir las yemas con la mitad del azúcar hasta que la mezcla tenga un color claro.
Seguir batiendo a velocidad media mientras añadimos la ralladura de limón y el aceite en forma de hilo, hasta que se haga una espuma consistente (a velocidad 4 durante unos 8 minutos)
Mientras, batir las claras con el azúcar a punto de nieve hasta que forme picos .Añadir a la masa anterior mezclando con la espátula de forma suave y también de abajo a arriba
Añadir las dos harinas mezcladas y tamizadas poco a poco mezclando ,ya de forma manual, con movimientos de abajo a arriba.
Colocar la masa, que debe ser muy esponjosa, en un molde de 24 cm y cocer durante unos 40 minutos .Si a la mitad del tiempo se dora en exceso, bajar a 160º.
Se pincha con una aguja par ver si está hecho, se apaga el horno dejándolo 10 minutos. Después se deja enfriar sobre una rejilla con un paño encima.